Luisa Rodríguez Táriba resultó electa presidenta de Sinergia, red de organizaciones de la sociedad civil venezolana, para el período 2023-25. Sustituye a la educadora Deborah Van Berkel, con más de 40 años en el activismo social y quien ocupaba el cargo desde 2012, tiempo en el que trabajó por el fortalecimiento del tejido social y en la promoción de los derechos de participación, libre asociación y el derecho al desarrollo.
Estos principios, ahora serán reforzados y expandidos por el equipo que encabeza Rodríguez Táriba, activista y defensora de Derechos Humanos, con más de 20 años de experiencia en el trabajo articulado por la difusión, educación, promoción, protección, exigencia y defensa del derecho a la salud y la vida de las mujeres, especializada en Gerencia de proyectos de desarrollo social, Gobernabilidad y Políticas Públicas, Negociación y Acuerdo, Lobby Internacional en Salud, Derechos de los Pacientes y Responsabilidad Social Empresarialy fundadora, en 2002, de la Fundación de Lucha Contra el Cáncer de Mama (Funcamama),
A Rodríguez Táriba la acompañarán en esta misión Marianela Balbi (Ipys) en la vicepresidencia y, en la tesorería, Rocío Guijarro (Cedice Libertad). 52 asociadas, que representan el 78% de las organizaciones escogieron el consejo directivo que quedó compuesto por Acción Solidaria, Cedice Libertad, Funcamama, Banco del Libro, Transparencia Venezuela, Invesp, Ipys, Asociación Venezolana de Mujeres (AVM) y Fundación Vivienda Popular.
52 votos de las 65 asociadas con las que cuenta la red armaron la nueva junta.
La red Sinergia fue fundada por el padre Armando Janssens, fundador del Grupo Social Cesap, que también forma parte de esta red de 65 organizaciones no gubernamentales venezolanas.
Pasa el testigo
Las prácticas democráticas, articulación, dinámicas para la defensa del espacio cívico, incidencia social, desarrollo sostenible e impacto no solo en el espacio nacional sino también en el internacional, son parte de los pilares que sostienen la Red Sinergia que en esta última década consolidó Van Berkel.
“Hoy tenemos el cierre de esta responsabilidad, de representación y de coordinación. 1996, cuando nace Sinergia, fue para crear la confianza para un trabajo en colectivo y, ahora, vemos cómo desde ese tiempo hemos construido una referencia de actuación de la sociedad civil, no solo en el ámbito nacional sino en el internacional”, dijo al comenzar la asamblea extraordinaria con la participación de cerca de 50 organizaciones de la red.
Este espacio de confianza, destacó, debemos preservarlo y continuar trabajando. “Esto representa también la oportunidad, entre todos, de que esa acción colectiva vaya en defensa del espacio cívico. Es una acción que requiere mucha determinación, una acción para resistir muchas veces, pero también de persistir y de construir esas capacidades para la transformación, porque nosotros no aspiramos el poder, nosotros aspiramos el bien común, un compromiso para el cambio en Venezuela, un cambio para la democracia, para el desarrollo sostenible y para la defensa de los derechos fundamentales y de las libertades que deben ser aseguradas para todos”.
Van Berkel enfatizó que toca seguir impulsando esa participación, ese compromiso y esa convicción para no aceptar la normalización del autoritarismo y de la exclusión.
Articular el movimiento
Por su parte, Luisa Rodríguez Táriba, quien lleva 17 años en Sinergia, una vez se dio a conocer el veredicto (ella venía desempeñando las funciones de vicepresidenta con alta incidencia en el espacio internacional), refirió que esta nueva etapa de la Red, tiene como compromiso hacer el trabajo lo más articulado posible.
“Una de las cosas en la que estamos enfocados es que, desde el movimiento de las organizaciones de los derechos humanos no se pierda el contexto. No podemos vernos como islas, pues compartimos el mismo océano. Trabajemos para que las próximas generaciones tengan otros problemas que solucionar. Estos tiempos que nos vienen procesos tan interesantes en el país, nos hace un llamado a tener muy presente cuál es el problema de la sociedad civil, tener muy claro que la defensa de los derechos humanos es de todas y todos. Ese postulado de que nadie se quede atrás”.
Con las herramientas que tenemos, con el tiempo histórico que estamos viviendo y con la experiencia que tengo, vamos a seguir consolidando la articulación, participación y el desarrollo, destacó la defensora quien durante toda su participación hizo reconocimiento al equipo operativo de Sinergia que la acompaña, el cual está bajo la dirección ejecutiva de Morella Ramírez.
Durante la asamblea extraordinaria se presentó el balance financiero de la organización y los proyectos que en la actualidad se desarrollan de la mano con aliados de la Red y de otras organizaciones ligadas a la defensa de los Derechos Humanos.
Redacción: Prensa Sinergia