En situaciones de crisis energética, como la que actualmente vivimos en Venezuela, uno de los principales problemas más allá de la falta de electricidad, es la carencia de agua potable. La contaminación durante el transporte y durante el almacenamiento en el hogar presenta un riesgo significativo para la salud.
Estudios realizados por la Organización Mundial de la Salud (OMS) revelaron que el agua recolectada generalmente proviene de fuentes contaminadas con heces, fertilizantes y otros agentes y, por consiguiente, representa riesgos de enfermedades infecciosas para los consumidores. Además, si bien la calidad microbiológica del agua puede ser aceptable en el momento de su recolección, esta se puede contaminar con patógenos de origen fecal durante su transporte y almacenamiento debido a las condiciones insalubres de su almacenamiento y manejo.
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Cómo mejorar la calidad del agua en casa
Existe una gran variedad de tecnologías para el tratamiento del agua en casa que se han usado en diferentes partes del mundo. Las tecnologías más conocidas para mejorar la calidad microbiológica del agua y disminuir la incidencia de enfermedades transmitidas por el vital líquido son:
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Hervir: Después que alcanza el punto de ebullición, dejar hervir por 5 minutos.
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Sedimentar o dejar el agua en reposo hasta que los sólidos se separen y se vayan al fondo.
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Filtrar:
- Con arena son los más comunes y fáciles de usar, requiriendo un escaso mantenimiento. Consiste en pasar el agua a través de varias capas de arena con una variedad en tamaño y gravedad diferentes.
- Con filtros industriales: Eliminación de los cuerpos suspendidos en el agua.
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Mejorar la turbidez:
- Cloro: El método más usado es desinfectar con cloro el cual es el desinfectante más barato y eficaz.
- Yodo: Es un desinfectante excelente para el agua, sólo 10 gotas de yodo son capaz de actuar contra bacterias y virus, así como otros microorganismos transmitidos por el agua. Hay que tener en cuenta que su uso y disponibilidad han sido limitados.
- Carbón activo es el principal elemento para tratar la turbidez, adsorbiendo diversas sustancias como metales pesados, colorantes, detergentes, sustancias de mal olor y color al agua.
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Desinfección química con agentes germicidas (principalmente el cloro).
- Para cada litro de agua, agregar 2 gotas de cloro (concentración al 5%) Esperar 30 minutos antes de consumir.
- En casos de emergencia, que no pueda esperar el tiempo requerido, agregar 4 gota de cloro.
El acceso al agua potable es fundamental para la salud, uno de los derechos humanos básicos y un componente de las políticas eficaces de protección de la salud. ODS 20130/Objetivo 6: Agua limpia y saneamiento
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